Cirugía ortognática Clase 3

La cirugía ortognática clase III esquelética o prognatismo mandibular se da cuando existe una discrepancia anteroposterior entre la mandíbula y el maxilar, mostrándose desalineados y con la mandíbula desarrollada en exceso y adelantada respecto al maxilar. En estos casos el efecto estético es tremendamente visible, otorgando al rostro una sensación de agresividad, si bien también presenta efectos funcionales importantes al impedir con frecuencia la correcta oclusión de los dientes. Tradicionalmente es una de las patologías del rostro que provocan mayores problemas psicológicos a quienes la padecen.

Aunque en algunos casos el problema es de origen dental y pueden corregirse con ortodoncia, es habitual que el origen sea de naturaleza esquelética -exceso de desarrollo en la mandíbula-. En estos casos es necesaria una cirugía ortognática, que puede ser monomaxilar -actuando únicamente en la mandíbula- o bimaxilar actuando sobre las dos estructuras esqueléticas. Es también habitual combinar esta cirugía con un tratamiento de ortodoncia, o de una mentoplastia para rebajar la prominencia del mentón y dotar de mayor armonía al rostro.

Como en cualquier otra cirugía ortognática, hablamos de uno de los tratamientos quirúrgicos con un mayor impacto estético y funcional sobre el rostro, modificando de manera notable la estructura facial y aportándole simetría y estabilidad, suavizando el conjunto del rostro y aportando al paciente importantes mejoras en su propiocepción y autoestima.

Además, la cirugía ortognática clase III permite mejorar notablemente funciones como morder, masticar o hablar al realinear los dientes, eliminando molestias y dolores en la articulación temporomandibular (ATM) encargada de la masticación.

En aquellos casos en que la dirección de la cirugía es contraria a la dirección del crecimiento óseo del paciente, es necesario esperar a que este finalice su crecimiento y entre en la edad adulta. No obstante, en los casos en que dirección quirúrgica y de crecimiento sean la misma, el paciente puede operarse a partir de los 12-14 años.